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jueves, 27 de abril de 2017

Este Viernes en Letrambulario Radio: adios al mes de los niños...








La mayor diversión de la infancia son las series animadas y los personajes entrañables que hasta la fecha recordamos. Algunas de estas caricaturas siguen fielmente las versiones literarias, otras continúan las aventuras de sus protagonistas posteriores al final del libro. Viajemos pues por el túnel del tiempo y revivamos nuestra infancia con mirada literaria en nuestro especial Abril, mes de los niños: Del papel al cel, las series animadas toma 5. Aquí en letrambulario radio; porque las palabras también son animadas… 


A la hora de crear una serie, los referentes que se utilizan como base inspiradora son inagotables. Una canción, una experiencia personal, la noticia de un periódico… cualquiera puede ser susceptible de ser transformada en un producto televisivo. Pero si hay alguno por encima de ellos, alguno que ha demostrado su valía a la hora de verse adaptado a la pequeña pantalla, ésas son las novelas.

Hacer ficción para niños puede resultar tan libre y estimulante como complicado. Son un público agradecido, que sabe entrar en las historias y dejarse captar por los planteamientos. Historias en las que impere la magia, los seres sobrenaturales… los niños parecen más dispuestos a dejar pasar ciertas explicaciones pilladas por los pelos. Pero también son un público exigente, quieren ser sorprendidos y fascinados, y, para lograrlo, muchas veces, no hay nada mejor que un buen libro.

En las opiniones encontradas, tenemos al  del típico “ya no se hacen caricaturas como las de antes”. Quizá es porque cada uno aprecia lo que vivió y los ojos de adulto ya no permiten ver las “grandes virtudes” de las series de ahora. Sea como fuere, los dibujos de antaño que poseían un humor simple y cándido, pero casi siempre repletos de aventuras. Y de literatura, mucha literatura.
Esto sirvió para traer a la pantalla chica versiones animadas de los grandes clásicos cambiando los protagonistas humanos por animales antropomórficos, como fue el caso de “D”artacán y los tres Mosqueperros, La vuelta al mundo de Willie Fog, Las Aventuras de Sylvan  o Sherlock Holmes. Aunque también surgieron versiones fieles a la novela como es el caso de Don Quijote de la mancha, El Conde de Montecristo, David el Gnomo, La familia Robinson o La abeja Maya, este último basado en un libro escrito en 1912 por el alemán Waldemar Bonsels.




Algunos estudios como el desaparecido FILMATION, quien trajo grandes éxitos como  Bravestar,  He-man y los amos del universo o Sport Billy, hicieron adaptaciones animadas de los clásicos siguiendo las  aventuras de los protagonistas posteriores al final del libro, como fue el caso de El Planeta de los simios, Viaje al centro de la tierra, Viaje fantástico o Las aventuras del Capitán Nemo.



Los  personajes de las historietas como Archie  y los súper héroes no podían quedarse atrás, llegando a la pantalla series como Las aventuras de supermán, Aquamán, La liga de la justicia de América, Las aventuras de Batman y Robin, Capitán América y los héroes Marvel, Los cuatro fantásticos, Los Súperamigos o El sorprendente Hombre araña.  También se han producido series animadas basadas en personajes famosos. En estos casos podemos citar respectivamente a deportistas, como fue el caso de  Muhamed Ali, Mr. T  o Las aventuras de Pelezinho (basado en la infancia del jugador “Pelé”). Cantantes como Los Beatles, Los Hardy Boys,  Los Jackson Five o Kid Video. En el ramo de comediantes tenemos a El gordo y el Flaco, Los tres chiflados, Jerry Lewis, y hasta íconos populares como es el caso de Spot Billy la mascota de la FIFA,  Cobi, la mascota olímpica de los juegos olímpicos en Barcelona 92 o Pac-man, basado en el popular videojuego Homónimo.

  





En las siguientes degustaciones, vamos a hacer un recorrido por diferentes series de dibujos animados que primero nacieron en papel y tinta y, después, pasaron a la televisión, encarnando algunos de los personajes más recordados por los niños. Escúchanos este Viernes a las 20 horas, tiempo de México, por www.radiomorir.com radio cultural por internet

miércoles, 19 de abril de 2017

Esta semana en Letrambulario radio


La novela gráfica es un derivaddl cómic y por ella se entiende una historia de cierta extensión, ilustrada con viñetas, en tono serio y «adulto» y con línea narrativa similar a las de las novelas literarias. Normalmente su encuadernación es como la de los libros y (a diferencia de los cómics, asequibles en puestos de periódicos) se distribuye a través de librerías y tiendas especializadas.
Los antecedentes de esta forma de expresión gráfica y literaria los encontramos en fuentes tan antiguas como las pinturas rupestres de la prehistoria, los manuscritos medievales que contaban con ilustraciones que apoyaban la narrativa o en ciertas novelas del siglo XVIII y XIX, que se acompañaban de grabados e ilustraciones. Pero la novela gráfica, como tal, es un producto del siglo XX: en los años 40, por ejemplo, existieron los famosos Clásicos Ilustrados, que novelizaban e ilustraban algunas obras clásicas de la literatura, y en la década de los 60, el boom de la industria del cómic hizo que los autores buscaran nuevos formatos y maneras más audaces de presentar sus historias.
Así fue como, en 1971, apareció Blackmark, de Gil Kane y Archie Goodwin —un cómic de 200 páginas acerca de magia, capas y espadas— la cual es generalmente aceptada como la primera novela gráfica, aunque en su momento no se definía como tal. Siete años después, A Contract with God, de Will Eisner, fue la primera obra que se definió a sí misma como «novela gráfica».

La década de los 80 marca el auge de la novela gráfica: de 1982 a 1988, Marvel sacó al mercado una serie de novelas gráficas de la mano de algunos célebres autores como J. M. Dematteis, Bill Sienkiewicz y Frank Miller. Por su parte, DC Comics dio una nueva dimensión al formato con la publicación de The Dark Knight Returns (1986) —una pesimista historia de Frank Miller que retrata las andanzas de un Batman anciano en una sociedad distópica— y Watchmen (1987), una serie de Alan Moore y Dave Gibbons que hizo que la prensa declarara que los cómics dejaron de ser «cosa de niños».
Un factor decisivo para la popularización de las novelas gráficas ha sido —(si…adivinaron) — su salto a la pantalla grande. Películas como Akira (1988), Judge Dredd (1995), Desde el infierno (2001), Ghost World (2001) y, en estos últimos años Sin City de Frank Miller (2005), V de venganza (2005), Una historia violenta (2005), 300 (2006), Persépolis (2007), Sandman y Coraline de Neil Gaiman (2008) Watchmen (2009), Kick-Ass (2010) Scott Pilgrim vs. the World (2010) dan fe de que Hollywood entre muchos otros medios ha hallado una rica veta que explotar  para deleite de los fans del género, como lo veremos en las degustaciones de hoy…

viernes, 14 de abril de 2017

Hoy Viernes en Letrambulario Radio:

El Mar es una gran extensión o volumen de agua salada inferior en tamaño a un océano. Estos cúmulos de agua al igual que el océano tienen ecosistemas, mareas y corrientes, pero en definición los mares son conjuntos de agua que tienen nombres de acuerdo a la región en la que se encuentren. Culturalmente, los mares reciben nombramientos simbólicos según la historia o los acontecimientos que hayan ocurrido ahí anteriormente. El término mar también se emplea para señalar todo aquello que viene en grandes cantidades, un mar de lágrimas, o una marcha en la que un mar de personas caminan. Autores de todo el mundo resumen esa ambigua riqueza diciendo que el mar ha sido siempre una "gran fuente de inspiración literaria" cuya lectura refleja "toda su belleza, misterio y crueldad" mismos que sirven como escenario para muchas historias en cualquier género, mismo que se toman como parte de un viaje por las aguas como es el caso de Los viajes de Gulliver, Nostromo o Motín a Bordo.

En el libro 20,000 leguas de viaje submarino de Julio Verne, narra como a la desaparición de barcos atribuida a un monstruo marino, el gobierno norteamericano decide enviar una expedición formada por el doctor Pierre Aronnax, su compañero Concejo y Ned Land, un arponero canadiense para desentrañar tal misterio. A bordo de la fragata Abraham Lincoln y tras meses de infructuosa investigación son finalmente sorprendidos por el pretendido “monstruo” que en realidad es un vehículo construido por el enigmático y vengativo Capitán Nemo.

En el cuento La Sirenita de Hans Christian Andersen, una sirena renuncia a su mundo para seguir al amor de su vida, un príncipe humano quien ignora los sentimientos de ésta, y que el precio que ella debe pagar por estar a su lado puede ser muy alto.

Siguiendo en la temática marítima, tenemos el género poético en el libro Poemas del mar, de D. McClatchy, en este libro podemos enamorarnos de las leyendas de piratas y las sirenas, los barcos fantasma, las ciudades perdidas, los faros y naufragios, las algas y los icebergs, que tanto nos fascinan en la mar.





Otros autores narran sus experiencias marítimas ya que están basadas en hechos reales, como ocurre en el libro Una noche para recordar, de Walter Lord Publicado en 1955 por el escritor estadounidense Walter Lord, es un libro de no ficción que recuerda los acontecimientos que rodearon el hundimiento del trasatlántico Titanic en 1912. Lord entrevistó a docenas de sobrevivientes al investigar para el libro y se esforzó por volver a contar los acontecimientos de aquella noche fatídica con la mayor precisión posible.
Vamos a darle el primer mordisco a nuestra tostada con las degustaciones de hoy…

Escúchanos este y todos los viernes en punto de las 20 hrs. tiempo de México por www.radiomorir.com radio cultural por internet.
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martes, 4 de abril de 2017

Este Viernes en Letrambulario Radio:


Una parte del juego que disfrutamos desde niños es gracias a una herramienta muy querida: el juguete. Por ello, el colibrí letrambulante ha dedicando este programa a los carritos y muñecas que nos hicieron pasar incontables momentos felices en nuestro ciclo Abril mes de los niños: Los libros de juguete, toma 4.





Un juguete es un objeto para jugar y entretener, generalmente destinado a niños. Ciertos juguetes son apropiados también para animales domésticos. Los juguetes pueden ser utilizados individualmente o en combinación con otros. Ciertos juguetes son asociados con épocas históricas o culturas particulares, mientras que otros aparentan poseer popularidad universal.


Los juguetes para niños y niñas suelen diferir en temática, teniendo por lo general un reflejo en la vida adulta de su propia cultura. Así, por ejemplo, muchos juguetes para niñas representan tareas adultas típicamente femeninas, tales como la crianza (muñecas) o la vida doméstica (utensilios de cocina); mientras que muchos juguetes para niños incluyen típicamente elementos bélicos o de acción: armas, automóviles, caballos.




Hay escritores que han dedicado un lugar en sus novelas a los juguetes, tal es el caso de Günter Grass y su libro El tambor de Hojalata que narra la vida de Oscar Matzerath, un niño que rechaza el mundo adulto y decide a la edad de tres años dejar de crecer. A pesar de este alto en su crecimiento, se siente "completamente terminado por dentro y por fuera", en un estado muy superior a los adultos. En su tercer cumpleaños recibe de su madre un tambor de hojalata, que se convierte en compañero constante de ahí en adelante, incluso cuando se le interna a los 29 años en un hospital psiquiátrico.



Otros cuentos sobre juguetes son en su mayoría dedicados al lector infantil en los cuentos como “Pinocho” de Carlo Collodi, “El soldadito de plomo” de Hans Christian Andersen, “El trompo de palo santo” de Gustavo Roldán, “Casa de muñecas” de Henrik Ibsen cuyo personaje, el destino, “maneja” la vida de los protagonistas al igual que el juguete que lleva por título.
Las generaciones vienen y van; pero los juguetes prevalecen y evolucionan con el paso del tiempo, aunque hay juguetes clásicos y clásicos literarios que permanecerán para siempre.